Jehová es mi fortaleza y mi cántico

Éxodo 15:2-3 “Jehová es mi fortaleza y mi cántico, y ha sido mi salvación. Este es mi Dios, y lo alabaré; Dios de mi padre, y lo enalteceré. Jehová es varón de guerra; Jehová es su nombre.”

Introducción

Éxodo 15 es conocido como el cántico de Moisés, un himno de victoria después de que Dios libró a Israel del ejército de Faraón en el Mar Rojo. En estos versículos, Moisés declara quién es Dios para su pueblo: su fuerza, su canción, su salvación y su guerrero victorioso. Este pasaje nos enseña cómo responder a los actos poderosos de Dios en nuestra vida.

1. DIOS ES NUESTRA FORTALEZA EN MEDIO DEL PELIGRO “Jehová es mi fortaleza…” (Éxodo 15:2)

  • Israel acababa de salir de una situación imposible; humanamente, no tenían salida.

  • Dios fue su fuerza cuando ellos no tenían poder.

Salmos 27:1  “Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién temeré?”

Isaías 40:29 “Él da esfuerzo al cansado y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.”

Cuando nuestras fuerzas fallan, Dios se convierte en nuestro sostén, nuestro poder y nuestra capacidad para soportar cualquier batalla.

2. DIOS ES NUESTRO CÁNTICO Y MOTIVO DE ALABANZA “…y mi cántico…” (Éxodo 15:2)

  • Moisés y el pueblo no solo vieron a Dios obrar, sino que su reacción fue cantar.

  • La alabanza surge de un corazón que reconoce la mano de Dios.

Salmos 40:3 “Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios.”

Salmos 98:1 “Cantad a Jehová cántico nuevo; porque ha hecho maravillas.”

Cada victoria de Dios debe convertirse en una canción en nuestra vida. La alabanza nos recuerda quién es Dios y fortalece nuestra fe.

3. DIOS ES NUESTRA SALVACIÓN PERSONAL “…y ha sido mi salvación. Este es mi Dios, y lo alabaré…” (Éxodo 15:2)

  • La salvación es más que un acto general; es personal: “mi salvación”.

  • Dios no solo libera al pueblo; libera a cada individuo que clama a Él.

Salmos 118:14 “Mi fortaleza y mi cántico es Jah, y él me ha sido por salvación.”

Isaías 12:2 “He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré.”

Dios quiere que cada uno experimente Su salvación: espiritual, emocional, y aun en situaciones difíciles de la vida.

4. DIOS ES GUERRERO Y PELEA POR NOSOTROS “Jehová es varón de guerra; Jehová es su nombre.” (Éxodo 15:3)

  • Dios se revela como un guerrero que enfrenta y destruye a los enemigos de su pueblo.

  • Él pelea batallas que nosotros no podemos pelear.

Éxodo 14:14 “Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos.”

Deuteronomio 3:22 “No los temáis; porque Jehová vuestro Dios, él es el que pelea por vosotros.”

No necesitamos temer cuando enfrentamos enemigos, circunstancias, o fuerzas espirituales: Dios pelea a nuestro favor con poder y autoridad.

Conclusión

Éxodo 15:2-3 nos revela un Dios completo: fortaleza para sostenernos, cántico para alegrarnos, salvación para rescatarnos, y guerrero para defendernos.

Así como Israel celebró al ver la mano poderosa de Dios, también nosotros debemos responder con confianza, gratitud y alabanza. Cuando reconocemos quién es Dios, nuestra fe se levanta, nuestras batallas se alinean bajo Su autoridad y nuestra vida se llena de esperanza.